El pasado sábado 18 de octubre, nuestras estudiantes de 4° Básico vivieron con profunda alegría y emoción su Primera Comunión, participando plenamente del Banquete Eucarístico en un momento de encuentro íntimo y personal con Jesús.

Durante todo su proceso de preparación, las niñas fueron acompañadas con dedicación por sus catequistas, profesoras y familias, quienes asumieron con compromiso la hermosa misión de cultivar y fortalecer la fe en sus corazones.

La ceremonia fue presidida por el Padre Marcelo Oñederra, S.J., capellán de nuestro colegio, quien durante su homilía compartió un mensaje lleno de ternura y profundidad. Recordó una conversación previa con las alumnas, en la que les preguntó:

“¿Qué diferencia hay entre un buen plato de comida y Jesús?”
Varias respondieron que el plato de comida se acaba, pero Jesús permanece en nuestra vida y llega a nuestro corazón.

El Padre Marcelo las invitó también a conversar en familia sobre quién es Jesús para cada uno, destacando la importancia de mantener viva la presencia de Cristo en el hogar y de ser testimonio para las niñas más pequeñas.

En un momento especialmente significativo, tres alumnas participaron en una homilía interactiva representando a la Sagrada Familia con títeres, una dinámica que permitió reflexionar sobre la vida familiar y el papel esencial del amor, la firmeza y la formación espiritual dentro del hogar.

Como comunidad educativa, reafirmamos nuestro compromiso de acompañar la vida espiritual de nuestras alumnas, guiándolas para que sigan creciendo en la fe y en los valores del Evangelio, tan necesarios en el mundo actual para iluminar las conciencias y construir la paz.